La lucha por la cancillería
alemana ha empezado a calentarse en las últimas semanas y a ello ha
contribuido el efecto Martin Schulz, el candidato de los socialdemócratas
alemanes que parece haber añadido un poco de picante a unos comicios que se
preveían insulsos y en los que parecía que AfD o Alternativa por Alemania erala
la única que podría traer alguna novedad. Antes de nada, hay que tener en
cuenta que todo parecía indicar que, si los números daban, se iba a producir de
nuevo la constitución de una Gran Coalición, o Große Koalition,
entre el SPD y
la CDU-CSU, los demócratas-cristianos capitaneados por la canciller, Angela
Merkel.
El hecho es que, desde que Schulz
se convirtiera el pasado 24 de enero extraoficialmente como candidato del SPD
para las elecciones del
próximo 24 de septiembre al Bundestag, todo están siendo buenas noticias, a priori, para la
formación socialdemócrata. Por lo menos virtualmente, ya que eso es lo que
están indicando las últimas encuestas, realizadas entre el pasado 25 de febrero
y el 11 de marzo.
Vayamos a los datos. De las últimas once encuestas
realizadas, en dos de ellas, Schulz sobrepasaría por la mínima a Angela Merkel
y podría liderar la negociación para poner en marcha un nuevo gabinete,
mientras que en el resto Merkel mantiene la primera posición, aunque su
liderazgo se encuentra bastante mermado.
De Impru20 - Trabajo propio, CC BY-SA 4.0, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=52281152
Haciendo una media de los once últimos sondeos,
Merkel obtendría algo más del 32% de los sufragios y Schulz el 31.4% de los
mismos. En tercera posición se colocaría
Frauke Petry, la presidenta de AfD con casi el 10% de los
votos, aunque oficialmente no ha sido designada por su partido
para las elecciones, los candidatos de Die Linke, Sahra Wagenknecht y Dietmar
Bartsch con un 8%, Cem
Özdemir y Katrin Göring-Eckardt de los Verdes
se colocarían en quinta posición con algo más del 7% y Christian Lindner del FDP o los liberales con un
6,7% de las papeletas quedaría en última posición.
Cabría preguntarse, por qué
Schulz tendría que estar tan contento si todo indica que Merkel sigue siendo la
preferida por los alemanes. Muy sencillo, porque desde su llegada el SPD parece
haber dejado atrás la dinámica derrotista que le llevó en las pasadas
elecciones a cosechar uno de sus peores resultados con un escueto 25,7% de los
sufragios. Además, si la tendencia se mantiene, puede que se convierta en el
próximo canciller de Alemania.
Escucha sobre el estado de forma de las diferentes formaciones en el siguiente podcast:
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