La agenda de Rajoy estará marcada, sin lugar a dudas, por una nueva concepción de la política exterior y el deseo de jugar un papel puente entre América Latina y la Unión Europea.
En los próximos cuatro años el Gobierno de Mariano Rajoy -una vez confirmada su victoria con mayoría absoluta en el rápido escrutinio, como informó Hechos de Hoy- intentará marcar distancias respecto a la acción exterior emprendida por José Luis Rodríguez Zapatero y este cambio se hará más que visible a través de la vertebración de una nueva política iberoamericana. A partir de esta idea, caben muchas conjeturas, pero también hay lugar para certezas.
En primer lugar, podemos afirmar que, de acuerdo a lo que ha dado a conocer Rajoy durante la campaña electoral, España va a intentar jugar un papel puente entre América Latina y la Unión Europea, en un intento de recuperar prestigio en ambas regiones. Con este objetivo por bandera, es probable que se produzca un proceso de europeización de la política exterior, al contrario de lo que sucedió durante la segunda legislatura de José María Aznar... SEGUIR LEYENDO EN 'EL INDIANO' DE 'HECHOSDEHOY.COM'
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