ETB, el Rey y sus mensajes



Leo que ETB, la televisión pública del País Vasco, va a emitir por primera vez en su historia el mensaje navideño del Rey Juan Carlos . No es que sea un gran admirador de unos monólogos que suelen caracterizarse por una monotonía preocupante y por una neutralidad llevada al extremo. Hay que reconocer que estos discursos del Jefe de Estado no constituyen un hecho noticioso en sí, sino que se han erigido más como una tradición institucional. Y digo que no son destacables en cuanto a la actualidad política porque de ellos no emanan ninguna novedad. Es verdad que expresan algunos puntos que desde la Casa Real consideran importantes: rechazo del terrorismo, necesidad de cohesión social, ánimo al diálogo entre formaciones políticas... pero no aportan nada más. Y precisamente así deben ser, porque resultaría demasiado peligroso que se inclinaran excesivamente, políticamente hablando.

Pues bien, aunque hablemos de un acto político -como cualquier desarrollado por figuras políticas e institucionales- que poco aporta, resulta bastante interesante que ETB emita dicho evento. En primer lugar como muestra de responsabilidad y respeto institucional hacia una figura que representa (querámoslo o no) un sistema político que permite el desarrollo del propio ente autonómico de comunicación. En segundo lugar, como imagen de una normalidad política que deja a un lado un nacionalismo que se ha dedicado a intentar "euskaldunizar" a la ciudadanía vasca. Algunos dirán que es un intento de "españolizar" la región. Se equivocan, porque nadie está obligado a ver ese discurso navideño.

Al conocerse la decisión de Euskal Telebista, Iñaki Anasagasti se ha dedicado a atacar a la cadena pública. Habla de "españolismo", de "un rey castellano de 1975 absolutamente insensible a la realidad de una Constitución que dice defender". Y termina diciendo que "el franquismo digan lo que digan sigue pesando mucho. Y más en él, designado en 1969 'sucesor a título de rey' por encima de su padre". Todo esto lo dice un senador que recibe salario de un sistema que ataca y que en los últimos años es un cero a la izquierda en el panorama político.

Para salir de ese ostracismo en el que se encuentra, este señor se ha dedicado a atacar al rey para intentar erigirse como abanderado del republicanismo. Y sí, me niego a que este politicucho represente a un sector de la población que considera necesario que el Jefe de Estado esté sometido a la voluntad popular expresada a través del voto. Me niego porque aspira a una independencia vasca donde la tradición ocupe el lugar privilegiado. No hay que engañarse, este senador no quiere una república democrática para España.

Mientras tanto, un grupo en Facebook anima a desarrollar una sonora cacerolada durante el discurso de Su Majestad. No creo que tenga mucho éxito porque ese día a la gente lo que no le interesa es tener una discusión por temas políticos. Eso sí, tiene mucha más legitimidad que la que tiene este nacionalista nacido en Venezuela.

Comentarios

Lia ha dicho que…
Wenas!! Pues sí, parece que al final van a emitir en la ETB el discurso. Yo no creo que lo vea, la verdad es que en mi casa ni siquiera se apaga la televisión, simplemente en esos minutos nos levantamos del sofá y nos dedicamos a hacer otra cosa o hay tanto ruido que igualmente no se oye al rey.
Saludos!!
Duende Crítico ha dicho que…
En mi casa tampoco se ve porque mi madre y mi padre están preparando la cena y porque el resto nos dedicamos a tomar algo con los amigos antes de la cena.

Un abrazo.