Es un alcalde medio I

Dicen que el perfil del alcalde español es el de un hombre de entre 46 y 65 años y con estudios de Bachillerato. No lo voy a discutir. También comentan que el 23% de ellos son mujeres. Puedo creerlo a pies juntillas. La tendencia comenta que cada vez se están rejuveneciendo más. y que la mayoría se dedica, cuando no es edil, al sector servicios. Tendremos que pensar que es así. Pero no me apetece hablar más de datos fríos o de prototipos marcados porque para eso tenemos que sufrir a muchos de estos políticos. Pero vayamos a describir la actividad de uno de estos alcaldes medios, de estudios medios y de media carisma.

Pongamos, por ejemplo, que nuestro líder municipal se llama Manolo. Manolo es un personaje espabilado; sabe lo que le gusta a sus vecinos y sabe cómo dárselo y anunciarlo dándole bombo. Pero para hacerse notar en los medios de comunicación locales hay unas técnicas que nada tienen que ver con dar facilidades a los periodistas de la localidad que siempre se ven desplazados en su momento por los de la capital de provincias. Para nada. Si para conseguir unos votos más Manolo tiene que ser un poco populista, pues da igual: todo sea por la causa. Es verdad que su subida de sueldo fue mirada con malos ojos, pero eso queda en el olvido porque ya nadie se acuerda de ello. Manolo piensa que su trabajo por su pueblo debe estar bien recompensado cada cuatro años con una pequeña subida así que hace todo lo posible por conservar su puesto que lleva ostentando desde hace 17 años. En el olvido queda ese empleo que consistía en abrir su tienda de comestibles a las 9 y media de la mañana.

A base de nuevos parques o lo que Manolo denomina como "zonas de esparcimiento" se pueden conseguir muchas cosas. Y es que los parques, o en su defecto las nuevas plazas de aparcamiento colocadas en zonas poco transitadas que sirven para cubrir expediente, arañan muchos votos que se hacen indispensables. Pero no se consigue nada si no hay una cámara en el evento de inauguración de la nueva actuación local. Por eso hay que intentar movilizar a todos porque resulta imprescindible ver a Manolo cómo corta la cinta con los colores regionales, que para eso son nuestros ¡por Dios! Con esto se consiguen 20 votos aproximadamente. Si al lado del señor alcalde aparece un chiquillo al que besa mejor que mejor. Pero si aparece después una anciana a la que saluda, el número de apoyos conseguidos sube exponencialmente al número de gestos entrañables que realiza.

Y es que Manolo sabe de mercadotecnia política. Es consciente de que una de estas fotos que hemos descrito anteriormente vale más que arreglar esa acera con tantos agujeros o reparar la vieja potabilizadora que permite que todos los desechos de la localidad pasen al río tal cual salieron del recto o de la zona urinaria en su defecto. Hay que quedar bien de cara a la galería y ante las administraciones regionales que se ven tan cómodas como Manolo cuando pueden visitar el pueblo y decir que trabajan por sus paisanos. Porque si vemos lo que hace un presidente regional en una comunidad pequeña uno se puede echar a reír a base de visitas a fiestas patronales, nuevos colegios o impresionantes piscinas con toboganes y todo.

Pero dejemos a un lado eso de ganar votos. Debemos hablar de su equipo de gobierno, un gran grupo de personas que consigue satisfacer las necesidades de un municipio que avanza a base de ladrillo y de un puñado de emprendedores que se las ven canutas para seguir adelante. Bueno, pensándolo mejor, lo dejamos para otra edición que tendremos mucho trabajo.