Ya está aquí

La moda más rompedora en el panorama mundial llega al fin a España. Siguiendo la alta costura de los imanes más fundamentalistas y radicales del islamismo, el "burka" o "niqab", está haciendo furor en nuestro país, un estado en el que en teoría hombres y mujeres son iguales y no pueden sufrir sometimiento alguno. Parece una broma, ¡ojalá lo fuera! pero esto que les cuento es cierto. La edición digital e impresa de "El Mundo" se hacían eco ayer de la presencia de mujeres mahometanas con esta denigrante vestimenta que representa el más alto grado de machismo y vejación.

La imagen que les he puesto arriba no es Kabul, tampoco es Iraq o cualquier otro país que no disfruta de una verdadera democracia. Para sorpresa de todos, es Alcobendas, muy cerca de Madrid, la que está observando estupefacta este panorama que poco tiene de cultura y mucho de tortura. En este caso, por lo que se dice, las dos mujeres que visten el "niqab" pertenecen a una familia de origen saudí, acomodada y, como todos los fundamentalistas del reino de los petrodólares, es una "familia de bien".

Nunca hay que ser fundamentalista y creer que se tiene la verdad absoluta de todo, es cierto, pero viendo esto dan ganas de convertirse ultra-democrático o algo así si existe. ¿Cómo es posible que se permita llevar este engendro de vestido, que para nada representa el verdadero islamismo, por las calles de un país que reconoce las libertades de todos? ¿Permitiríamos a un maltratador pegar a su mujer en medio de la calle? No, ¿verdad? pues esto es prácticamente lo mismo. No se está atacando físicamente a la mujer, aunque si lo fuera tampoco lo podríamos ver, pero se la está doblegando anímicamente haciéndole creer que está al servicio de su marido pudiendo este hacer con ella lo que crea como si fuera de su propiedad. Amigos lectores, hoy no quiero mostrarme "correcto", porque esto, aunque sea una anécdota, es un atropeyo no sólo contra las mujeres sino contra un sistema democrático avanzado como el que disfrutamos en España. Algunos dirán que es cultura, pobres de ellos que practican un relativismo tan radical que se autodestruye a sí mismo. Cuando algo no respeta la libertad de un individuo, aunque este por fruto de una determinada educación crea que no es así, no hay cultura o algo parecido que pueda defenderlo.

Muchos fundamentalistas religiosos se encuetran anquilosados en la Edad Media como ocurre con el islamismo. Lo mismo sucede con muchos judíos y cristianos, no nos olvidemos y miren de vez en cuando determinadas prácticas de la Obra. Cuando un determinado grupo se cree en posesión de la verdad universal, sin respetar al resto ni a sus propios miembros, nos hayamos ante algo anacrónico propio de otros tiempos y prácticas. Hoy me siento cabreado, me toca las mismísimas narices ver esto y pensar que está en aumento. Esta "curiosidad" me ha dejado mal cuerpo tanto o más que recordar que hoy se cumple el cuarto aniversario del inicio de la guerra de Iraq con las consecuencias que todos sabemos. Hagamos algo, defendamos nuestro sistema y seamos ultra-demócratas o algo por el estilo, si existe claro.