Hoy no escribo desde mi cómodo portátil, ni tan siquiera desde mi querida habitación sino desde mi facultad de Ciencias de la Información para ver si se me pega algo bueno de ella. Pero bien, aquí no estamos para hablar de los muros espaciales que he roto para escribir en este blog, sino de otros que van desapareciendo de nuestro continente europeo, más concretamente en Chipre. Resulta que el Gobierno grecochipriota ha comenzado a desmantelar este jueves parte de la llamada "Línea Verde", el muro que divide en dos a Nicosia (capital de la isla mediterránea de Chipre). Con este gesto, parece que las cosas van a empezar a apaciguarse en una zona donde hasta el día de ayer, supongo que hoy todavía, desfilaban tropas de la ONU para mantener la seguridad.
"Esta noche hemos demolido el puesto de control en nuestro lado" ha declarado el presidente grecochipriota, Tassos Papadopoulos. Eso sí, el gobierno de Papadopoulos prohibe el paso de civiles hasta que Turquía no demilitarice la zona ya que si no se produjera esto no podría haber un verdadero paso. De esta forma, la pelota queda ahora en el tejado turco que está poniendo en peligro su entrada en la UE por no retirarse de la isla.
Algo de lo que podemos estar seguro, cuestiones políticas aparte, es de la gran alegría que ha provocado este hecho en los ciudadanos que ven nacer un nuevo futuro si se responde correctamente a este gesto. "Es muy bonito ver el muro caer. Hemos esperado años", ha explicado Yusuf Alp, un ciudadano grecochipriota. Las anteriores aperturas de la Línea Verde parece que han desenvocado en nuevas acciones de reconciliación nacional que incluso podrían permitir en un futuro un verdadero entendimiento entre gobiernos.
La historia de esta línea de separación se remonta a 1963 cuando las tropas británicas, encargadas de supervisar la seguridad tras los enfrentamientos entre turcos y grecochipriotas , decidieron establecer un cordón de separación tres años después de la independencia de Chipre. Fue más tarde cuando los turcos empezaron a controlar desde 1974 la parte norte de la isla y la autoproclamada República Turca del Norte de Chipre (RTNC) que sólo es reconocida por el gobierno de Ankara. La última iniciativa para resolver el conflicto entre los habitantes de la isla fue la llevada por la ONU en 2004 mediante un referendo en el que destacó la aprobación turcochipriota frente al rechazado grecochipriota, que consideraba que no era equilibrado y que legitimaba la ocupación turca.
Los muros están en vistas de desaparecer de nuestra geografía. Primero fue el de Berlín que acabó con una división global crítica, más tarde ha sido el de Chipre y parece que en un futuro les tocará a los de Cisjordania y Méjico. Esperemos que las divisiones artificiales fundamentadas en la lucha contra el terrorismo o la inmigración caigan como castillos de naipes, de una forma ligera y ventajosa para la ciudadanía.
Comentarios
Ojalá otros conflictos territoriales, como el del Sahara que nos toca más de cerca, se solucionen también.
Un saludo.
Saludos.
Necesitamos una Europa unida, justa y cohesionada en lo político, en lo económico y en lo social; también hay que derribar, pues, el muro que separa la Europa de los ricos y la Europa de los pobres.
Buen análisis, duende. Saludos.
Me imagino que tendrá mucho que ver con la petición de entrada a la union europea que se está estudiando en Bruselas...
ahora la bola a los turcos, que han sido menos listos... (ami nunca me han caido demasiado bien...será por que me parece ue no han sabido nunca aprobechar la posición geoestratégica que tienen o por los bigotitos ...no se ...)
(si, me encanta frivolizar sobre temas tan serios como éste, o encuentro divertido...los que me conocen saben que en el fondo tengo una opinión un poco mas profundita sobre el tema...)
besiños Nachiño!!
#Patiñet, claro que es bueno destruir fronteras injustas y que deberían ser ilegales. Un saludete.