¿A qué juegan?

Joseba Álvarez, "dirigente" de Batasuna

Los hay mentirosos, los hay inocentes, los hay chupaculos y los hay quienes son un compendio de todos estos factores. Así se ha mostrado Batasuna, sí esos que dicen "hacer política", esta mañana cuando Joseba Álvarez, representante de la formación ilegalizada, ha declarado todo convencido que "un atentado como el de Madrid no lo esperaba nadie". Parece ser que nos quieren hacer creer que ellos no sabían previamente de los movimientos de ETA, esa organización terrorista que lucha por la independencia de ese mito de "Euskal Herria".

En una entrevista para Radio Euskadi, Álvarez ha achacado la culpa al Gobierno de que ETA haya reiniciado los actos terroristas diciendo que "había una conciencia general en septiembre de crisis". A esto habría contribuído la cantinela de "la historia" de José Ignacio de Juana Chaos, las detenciones, "las ilegalizaciones que se mantenían". Por lo que se ve, mantener una justicia independiente no era lo que los batasunos querían. Claro, ellos lo que querían era que la sociedad española se arrodillara a la "raza superior del rh -" y por ahí no vamos a pasar los que creemos, en términos generales, en nuestro sistema democrático.

Estas declaraciones se producen tras las hechas por el Ministro de Interior dando por "roto, liquidado y acabado" el llamado "proceso de paz". En un intento de volver al consenso, que es lo que todos deberíamos buscar, ha anunciado una rueda de entrevistas con todas las formaciones políticas. Deseemos que salgan adelante esas conversaciones y que se suscriban más partidos al "Pacto por las libertades".

Mientras, la AVT se está manchando su legitimidad y su imagen dando acogida a grupos ultraderechistas en sus concentraciones. Una organización que acoge a un gran número de víctimas, a casi todas las de ETA vamos, de distintas ideologías no puede dejar politizarse tan facilmente por aquellos que enarbolan la bandera del aguilucho y hacen el saludo romano. Esperemos que con el fin del diálogo vuelvan las aguas a su cauce porque ellos no son así.

Es hora de trabajar, es tiempo de escuchar y hablar. Es el momento de perseguir a ETA hasta las últimas consecuencias, es el instante en el que más debemos estar unidos de nuestra historia para mantener nuestro sistema de libertades y no flaquear ante los asesinos. Demos todos el brazo a torcer, pongamos buena voluntad. ¿A qué juegan esos piltrafillas asesinos? Espero que sea a esconderse de la policía...